Combinar, en forma equilibrada, nuestra fórmula fundamental resumida en el lema, para entregar día a día una enseñanza de calidad, que nos lleve a ser el centro educativo del futuro. Los principios se basan en el marco filosófico del humanismo cristiano, por las políticas educacionales del supremo gobierno, establecidas en la legislación vigente y la reforma educacional actualmente en marcha.
Postulamos una escuela capaz de orientar su acción educadora, en base a principios de calidad, equidad y participación democrática, que haga posible que los niños y niñas reciban un servicio educativo pertinente, sin discriminación.
Aspiramos a que nuestra escuela sea un lugar social bien organizado, que contribuya a colocar la experiencia educativa en el alumno y a su alcance, sin dejar de estimular su desarrollo pleno, sus capacidades y potencialidades para aprender, inculcando valores personales, sociales y morales, basados en la justicia, el amor y el respeto, garantía de una convivencia democrática.